Tiempo de trabajar, tiempo de descansar
, Coordinadora de redacción | Dice el Eclesiastés ‘hay tiempo de trabajar, tiempo de descansar’ y parece que el tiempo estival lo referimos siempre a este último. Pero sólo en lo que se refiere a la vida laboral porque por lo demás es un tiempo que nos otorga multitud de oportunidades para seguir trabajando por el Reino. Entre muchas podríamos proponer algunas:
La primera es poder abrirte a los demás compartiendo tu tiempo con los más necesitados. Existe gran variedad de actividades, campamentos, voluntariados que son una verdadera oportunidad para practicar el amor fraterno y la caridad.
La segunda es poner en el Corazón de María tus preocupaciones. Es bonito como en nuestra geografía, durante el verano, se suceden las diferentes fiestas de nuestras localidades. ¡Cuántos pueblos celebran sus fiestas en honor a diferentes advocaciones marianas sacando en procesión a sus vírgenes por las calles! Momento para volver a decir: Madre, ruega por nosotros.
Y la tercera propuesta son unos días de oración y retiro. Un tiempo para el encuentro con el Señor y profundizar en su intimidad. Desde el Centro de Espiritualidad os ofrecemos diferentes fechas y tandas de Ejercicios Espirituales que podéis encontrar en las páginas centrales.
Os deseamos un feliz descanso y trabajo. Bendecido verano para todos en la presencia y compañía de Jesús y María.