Sagrado Corazón en Aldea del Obispo
, Profesor de Historia | Aldea del Obispo es una pequeña población de unos doscientos habitantes que se encuentra en la comarca de Ciudad Rodrigo, en la provincia de Salamanca, comunidad autónoma de Castilla y León. Hace frontera con Portugal. Eclesiásticamente la parroquia toma el nombre de San Sebastián, y pertenece al arciprestazgo de Argañán, en la diócesis de Ciudad Rodrigo.
En el punto más alto del municipio se alza la iglesia, al lado de las escuelas y del frontón. En la parroquia encontramos una imagen de la Virgen en su advocación de Nuestra Señora del Rosario. Rematando la fachada vemos una imagen del Sagrado Corazón de Jesús, que tiene la mano izquierda señalando el corazón en el centro del pecho, y la mano derecha levantada en actitud de bendición. Se trata de una escultura de molde, fabricada en cemento, de poco más de un metro de altura.
Cuentan que a mediados del siglo XX la imagen estaba delante de la casa parroquial, sobre un pilar, y que había sido donada por un misionero claretiano natural del pueblo. Aprovechando unas obras de mejora y rehabilitación de la iglesia, la imagen fue trasladada a lo alto de la fachada del templo, desde donde bendice a todos los vecinos. El edificio es del siglo XVI, aunque en épocas posteriores ha sido reformado; está construido con piedra de granito. El aspecto exterior del conjunto, con una torre, recuerda las fortificaciones que abundan por la zona fronteriza.
Recientemente, se ha restaurado el interior de la iglesia y el retablo y algunas imágenes; restauración afortunada, que ha devuelto el esplendor y la dignidad al lugar. Precisamente en esta restauración se ha recuperado una pintura que estaba detrás del retablo, pintura que representa un calvario con Cristo crucificado con la herida del costado, con el corazón abierto. También, en el interior de la iglesia, se venera otra imagen del Sagrado Corazón moderna, del siglo XX, que tiene los brazos extendidos y las manos abiertas.
Al visitar el interior del templo, comprendemos la religiosidad de los vecinos de Aldea del Obispo que, durante tantos años, han adorado a Jesús y han venerado las imágenes de los santos. Y que actualmente, cuando entran en la iglesia a rezar o a celebrar la Eucaristía, si miran a lo alto, ven la imagen del Corazón de Cristo que recuerda el amor misericordioso de Dios a todos.