En La Puebla de Montalbán, Toledo

Sagrado Corazón de La Puebla de Montalbán

Federico Jiménez de Cisneros, Profesor de Historia | Es La Puebla de Montalbán una de esas poblaciones históricas que tanto abundan en España. Está situado en el centro de la provincia de Toledo, junto al río Tajo. Es muy conocido por ser el lugar de nacimiento de Fernando de Rojas, autor de La Celestina, obra que refleja perfectamente la mentalidad católica de la época; y del cardenal don Pedro Pacheco, que intervino en el Concilio de Trento, y destacó por su defensa del dogma de la Concepción Inmaculada de la Virgen María. Históricamente este municipio destaca por sus palacios, arcos, conventos e iglesias y ermitas. Y precisamente junto a uno de estos conventos, el de las monjas concepcionistas, fundado por el cardenal Pacheco, se encuentra el monumento al Sagrado Corazón de Jesús.

Se trata de una plaza pequeña, en la calle de las Monjas, en el centro de la cual se colocó una columna rematada por una imagen en piedra. A los pies de la imagen unas inscripciones nos informan del año 1951, del nombre del alcalde de La Puebla de Montalbán en ese momento, que era don Anastasio Montalvo, y del apellido del autor de la imagen, R. Bravo.

La imagen de Jesucristo es de cuerpo entero, vestido con túnica y manto, que le llegan hasta los pies, que sobresalen del ropaje. Su cabeza muestra larga cabellera rizada, y tiene el brazo izquierdo caído con la mano abierta, y el brazo derecho con la mano señalando el corazón, visible en el centro del pecho. Mira al frente, y precisamente su mirada se dirige hacia el monasterio de monjas concepcionistas, donde una comunidad religiosa femenina vive en alabanza hacia Jesús a través de su Madre la Inmaculada Virgen María.

Este sencillo conjunto se encuentra en medio de una zona ajardinada, cuyas plantas y flores llegan hasta los pies de la imagen. El lugar donde se encuentra es un lugar tranquilo, que invita a la oración de agradecimiento hacia Jesús, cuyo corazón tanto ama a los hombres; lugar que invita a la paz y al recogimiento, al descanso, recordando la frase evangélica “Venid a Mí todos los que estáis cansados y agobiados, que Yo os aliviaré”.

En la histórica población de La Puebla de Montalbán este monumento nos recuerda que Dios es Amor, que nos ama a cada uno y que espera nuestro amor como respuesta.

Anterior

Madre Carlota, ejemplo de fidelidad a Dios

Siguiente

Sumario 159